Otro mate muy conocido y que aparece con relativa frecuencia en las partidas de ajedrez es el mate de Damiano, un mate que se caracteriza por la posición avanzada de un peón blanco situado en g6, o la de un peón negro situado en g3. Esta claro que la aparición de un peón contrario en mitad de nuestro enroque, además de ser una fuente de preocupación, puede inducir numerosas situaciones de mate, entre otras cosas porque dicho peón corta las salidas del rey negro a través de las casillas f7 y h7 (o f2 y h2 en el caso de tratarse del rey blanco) y, además, sirve de apoyo para que otras piezas de mayor potencial ocupen las ya mencionadas casillas.
El portugués Pedro Damiano (?-1544), fue el ajedrecista que en el siglo XVI dio nombre a este mate al ser el primero en describirlo. En el primer diagrama de ajedrez vemos el doble papel que juega el peón, por un lado sirve de apoyo a su dama y, por otro, impide que el rey contrario pueda huir por f7. La ejecución del mate es muy sencilla: 1. Dh4+ Rg8 2. Dh7++.
En el siguiente diagrama observamos otro ejemplo, algo más complicado, también propuesto por Damiano. La combinación que permite al bando blanco imponerse es brillante y muy bella, las dos torres blancas se van a autoinmolar para dejar que su dama blanca de la estocada final:
1. Th8+!! Rxh8
2. Th1+ Rg8
3. Th8+! Rxh8
4. Dh1+ Rg8
5. Dh7++.
Una variación de este mate es aquella en la que el peón incrustado en el enroque contrario se sustituye por un alfil. En el siguiente diagrama podéis ves una posición que bien podría corresponder a una partida de ajedrez real, está claro que el enroque negro está muy debilitado pero lo que no está tan claro es como las blancas pueden rematar dicha posición:
1. Ah7+ Rh8
2. Ag6+
Con este jaque doble ya tenemos a nuestro alfil haciendo las funciones de un peón en g6 y, además, impedimos que la dama negra pueda defender a su rey jugando Dh6.
2... Rg8
3. Th8+!! Rxh8
4.Dh5+ Rg8
5. Dh7++
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