Antes de entrar en el año 1983, permitidme de nuevo otra intercalación. Se trata de la fotografía original que en su día no encontré y que ahora tengo en mis manos y que se refería a la final de la Copa Catalana de 1ª categoría. Además he localizado el acta de dicho encuentro que figura a continuación.
Equipo del C.C. Sant Andreu -Vencedor Copa Catalana 1ª Categoría
Josep Boguñà, Ricard López, Antoni Domingo y 4 jugadores del Vilafranca
(Joan Bautista Ballester, Joan Tomàs, Nicolás Oñate y Pere Toledano)
Agachados: Joaquim Travesset, Josep A.García,
Josep M. Rise, Antoni Passarell y Daniel Travesset
(Foto: Archivo)
Dentro del año 1978 decía más o menos esto esto: “Este año el equipo A resulta vencedor en la Copa Catalana de 1ª Categoría, ganando la final al Vilafranca. En la imagen que sigue se unieron a la misma cuatro de los seis jugadores de dicho equipo. Por alguna razón que ignoro no encuentro las fotos originales y debemos conformarnos con la que figura en el butlletí “Anem al Casal” y con otra que tenía archivada. El match se jugó en el Casal el día 18 de junio de 1978.”
También había olvidado comentar que durante la Festa de la Casa, de 1982, se organizó un campeonato social de rápidas a 5 minutos, que fue un paseo para Josep Antoni Miralles, ganando todas las partidas. Muy buenas las actuaciones de Juanjo Sánchez y Ricard López. Flojo Travesset I, que ganó algunas partidas con mucha dificultad.
Año 1983
Ahora podemos empezar el 1983…
El Campeonato de Catalunya de la temporada 1982/1983 fue muy difícil para nosotros, después de las ausencias obligadas, por el servicio militar, de Miralles y Rise. A pesar de todo salvamos la categoría, que era nuestro deseo inicial. Estábamos convencidos que en la siguiente temporada las cosas irían mejor. A nivel individual los mejores jugadores, o sea los que consiguieron mejor puntuación fueron, por este orden, Daniel Travesset, Joan Casals, Fèlix Romero, Joaquim Travesset Ribera, Antoni Domingo, Eusebio Martínez y Josep Antoni García. Anguera faltó en dos partidos: Ronda 2 contra el Vulcà y ronda 8 contra el Calella y en ambos enfrentamientos perdimos por la mínima 4½ a 5½. Debo añadir que los concursos esporádicos de Bescós, Boguñà, Sala y Miralles -este último venido expresamente de Tenerife, con permiso, pudo jugar la última ronda-, fueron vitales para la permanencia. Una permanencia que pasó por una victoria concluyente contra el Guixolenc, 4ª ronda -8 a 2-; y otra, en la última ronda -ahora ya con Miralles- contra el 7 a 9 Ruy López por 7½ a 2½. Esta fue nuestra salvación. De los más conocidos, floja la actuación de Ricard López -que hubiera podido hacer más con un juego menos extraño que tanto le gustaba poner en práctica-, Díaz, Maiztegui y Duch. Pero no siempre se cumplen los deseos y las previsiones. Los jugadores que figuran en ambos encuentros podían interpretarse como los titulares, aunque también intervinieron Joan Camacho, Daniel Travesset, Josep Boguñà y Josep Maria Rise en algunos encuentros. Veamos los resultados de estos dos partidos…
Y estos fueron los resultados por equipos:
Nuestro segundo equipo lo hizo muy bien pero, una vez más, se quedó a un paso del ascenso. Todos pensamos que en el siguiente año a la tercera sería la vencida. Únicamente se perdió un partido: contra El Carmel.
Básicamente el equipo estuvo integrado por los siguientes jugadores: Antoni Domingo, Eusebi Martínez, Joan Casals, Manuel Simón, Càndid-Xavier Marrupe, Manuel Brandáriz, Daniel Travesset, Pere Díaz, Martín Pardina, Fèlix Romero, Josep Boguñà, Joan Sala, Josep Maria Rise, Joan Camacho, Xavier López y Jordi Herrero. Algunos de ellos jugaron algunas partidas en el primer equipo por falta de los titulares, y otros jugaron en este grupo, procedentes del tercer equipo.
Y el tercer equipo lo hizo muy bien, situándose en la mitad de la tabla. Cumplieron más de lo que se esperaba de ellos, teniendo en cuenta que casi siempre jugaron con infantiles. Estos fueron sus resultados:
Hubo algunas noticias agradables procedentes de los individuales de Catalunya: Fèlix Romero -14 años- y Daniel Travesset –trece-, conseguían la primera categoría, al igual que Xavier López Rodríguez.
A principio de año apareció la evaluación de la FCdE sobre los mejores jugadores catalanes. José Antonio Miralles y Jaume Anguera figuraban con los números 27 y 38 respectivamente, lo que no estaba nada mal.
A comienzos de enero empezó un nuevo campeonato social. Esta vez con un nuevo aliciente: se jugaría por sistema suizo y todos mezclados, con lo que se permitía a los jugadores más noveles poder enfrentarse a los más experimentados. El día antes de la Festa del Casal, por aquello de no coincidir por motivos de ruido, se jugó otro social -éste de partidas rápidas a cinco minutos- con dos invitados especiales. De un lado nuestro querido amigo Juanjo Sánchez y de otro el maestro catalán y subcampeón de Catalunya, Josep Paredes Prats, del Foment Martinenc, que también eran socios de la sección. Ahora podremos ver ambas clasificaciones y nos daremos cuenta de que las categorías de los jugadores prevalecieron en las clasificaciones. Hay que destacar las excelentes posiciones de los jóvenes Manuel Simón y Joaquim Traveset Ribera en las rápidas. Y si analizáis los resultados del cuadro os daréis cuenta de que hubo resultados del todo impredecibles, como las tablas de Sánchez, Simón y el infantil Daniel Travesset, contra el campeón. Además, este último obtuvo una destacada victoria sobre el preferente Ricard López. El triunfo de Josep Paredes fue incontestable.
Ahora podemos ver la clasificación del social. Como éramos 19 participantes, se optó por realizarlo por el sistema suizo. El torneo fue muy disputado y no se decidió hasta la última ronda, donde padre e hijo se enfrentaban y cualquiera de los dos podía conseguir el título. Brillante Joaquín Bescós, sin ningunas tablas, como en él era habitual: O caixa o faixa. Los jugadores se clasificaron por orden de categorías y el resultado de José Manuel Torres, que partía como tercero del ranking, fue decepcionante, si tenemos en cuenta su valía. Muy buenas las actuaciones de los infantiles Fèlix Romero y Daniel Travesset, así como las de Jordi Herrero y Josep Antoni García, que se encargó de amargarle la vida al vencedor.
También debo decir que Ricard López no tuvo suerte en esta ocasión, puesto que en la 7ª ronda cayó la bandera de su reloj, cuando tenía franca su partida contra Bescós.
Como aclaración añadiré que al lado del resultado de cada ronda figura una columna con números rojos. Es el número de salida de cada jugador. Cuando en lugar de número se ve un asterisco, es que el jugador descansaba, por ser los concursantes número impar.
Al propio tiempo también se jugó el social infantil, con una nómina de diez jovencitos, aunque algunos de ellos no tuvieron paciencia y dejaron de jugar algunas partidas. No participaron en el mismo ni Fèlix Romero ni Daniel Travesset, con objeto de que hubiera un cierto equilibrio en los inscritos. Buena victoria de Xavier Bescós, que únicamente cedió el punto al segundo clasificado, Josep Arbonés. Estos fueron los resultados:
Otra de las buenas noticias fue que Daniel Travesset Ribera volvió a quedar subcampeón infantil de Catalunya-1983. Esta fue la portada del programa y el escudo de la entidad.
El club d’Escacs Tordera, fundado en 1966, fue el organizador del torneo. El equipo siempre dispuso de una excelente trayectoria en los campeonatos de Catalunya por equipos, llegando a figurar en la máxima categoría. Un año después de su creación tuvo la buena idea de contratar a Arturo Pomar para que realizara una exhibición de simultáneas. Todo ello obedecía a fomentar el ajedrez entre los jóvenes.
Daniel nació el 6 de mayo de 1970 y conoció el ajedrez a los pocos años. Su abuelo, Àngel Ribera Arnal, excampeón de Catalunya y subcampeón de España, se encargó de darle algunas lecciones de cómo mover las piezas. No debían ser malas las lecciones cuando, con 7 años, consiguió sacarle tablas en unas simultáneas en el Saló de la Infància, en una posición francamente buena. En 1978, 79 y 80 queda campeón escolar en el colegio SAFA Horta. En 1980 juega el campeonato escolar de Barcelona y Comarcas y queda en segundo lugar, con los mismos puntos que el campeón. Queda también en segundo lugar –sin perder partida- en el torneo de Navidad del Foment Martinenc, por detrás de su hermano Joaquim. En el X Torneig Obert Infantil de Sant Andreu-1981, queda en segundo lugar. En 1982 ya había quedado subcampeón infantil de Catalunya, con los mismos puntos que el vencedor. Entre la fase previa y la final jugó 12 partidas, con estos resultados: +6 =6. En el pgn incluyo su primera partida de torneo, jugada el 15 de enero de 1979, cuando tenía ocho años.
Estos fueron los resultados:
El torneo, que empezó el 27 de junio y finalizó el 2 de julio, se jugó por sistema suizo a 6 rondas y Daniel fue por delante ganando las cinco primeras. En la última se enfrentaba a Lluís Comas que había perdido en la primera ronda. Así, pues, se enfrentaban en la última ronda. Fue un final de torre y peón contra torre, en una posición de tablas teóricas, pero un error grave de Daniel propició su derrota. En el acto de entrega de premios se celebró el día 3 de julio con una sesión de simultáneas a cargo del maestro catalán Josep Parés Vives. Únicamente vencieron Travesset y Pellicé. Dicha partida así como otras de este torneo figuran en el pgn.
La fotografía que sigue no es muy buena, pero es la única que tengo. En ella figuran todos los concursantes y los árbitros. Joan Fluvià –director del torneo-, en el centro de la imagen. Manuel Fernández Tatay -árbitro principal-, en el margen izquierdo y Àngel Ribera Arnal, en el margen derecho.
La siguiente fotografía fue hecha en la misma sala de juego.
Y este fue el dibujo que, en un periquete, realizó el amigo Francisco Ibáñez, para recordar el magnífico resultado de Daniel.
Nuestros dos mejores infantiles, Fèlix Romero y Daniel Travesset, que no participaron en el Social habían obtenido ficha de primera categoría-, realizaron diversas simultáneas. En Premià de Mar, Daniel jugó 12 partidas, ganando en todas ellas. En el Colegio de las Monjas (SAFA), de Sant Andreu, también ganó las 14 partidas que disputaba. En el mismo sitio, Fèlix jugó contra once adversarios, con el resultado de +7 =2 -2, aunque los adversarios podían ser algo más fuertes que los que se enfrentó Daniel. La única fotografía que poseo es la que sigue…
Este torneo tuvo muy buena aceptación, superando en siete el números de jugadores del año anterior. Es más, no se produjo ninguna deserción, mientras que en el Intantil de Catalunya del 1982 se produjeron algunas bajas durante el mismo, por diversos motivos. Unos justificados, como el de Fèlix Romero, por problemas familiares graves, pero otros tal vez debido a los malos resultados. Cuando alguien causaba baja en una ronda, sin previo aviso, siempre se esperaba a comprobar cuál sería su decisión en la siguiente. Faltaron consecutivamente en dos rondas Fèlix Romero, Joan Mellado, Fígols, Cots y Vega, mientras que Benedito no llegó ni a estrenarse. Esto es, a mi entender, una falta de respeto a la organización. Esta fue la clasificación final que no había incluido dentro del año 1982.
Otro acontecimiento importante ocurrió el 28 de septiembre de 1983 en una sesión de 25 simultáneas de Garri Kaspárov, ante representantes de Radio y Prensa y una decena de fuertes jugadores, entre los que se encontraban Alejandro Pablo, Manuel Pujol, Miguel Illescas, Josep Garriga, Josep Paredes… +21 =2 -2. Solamente perdió dos partidas: José Manuel Gil González, de 18 años, y José Antonio Miralles Sánchez, de 21. Pepita Ferrer y Valentí Álvarez consiguieron arrancarle tablas. Kaspárov estaba en Barcelona para recoger el Óscar Mundial de Ajedrez. Veamos una imagen de él con su firma.
Y ahora toca ver la gran partida de Miralles, que infligió al ogro de Bakú una severa derrota.
Kaspárov, Garri (Rusia) - Miralles Sánchez, Josep Antoni (Sant Andreu) [E84]
Simultáneas de Kaspárov en Barcelona 28/09/1983
1.d4 Cf6 2.c4 g6 3.Cc3 Ag7 4.e4 d6 5.f3 0-0 6.Ae3 Cc6 7.Dd2 a6 8.Cge2 Tb8 9.h4 h5 10.0-0-0 b5 11.Cd5 bxc4 12.Cxf6+ Axf6 13.g4 Cb4 14.Cc3 c5 15.gxh5 Da5 16.Axc4 cxd4 17.Axd4 Axd4 18.Dxd4 Dxh5 19.Thg1 Cc6 20.Dd2 Ce5 21.Ae2 Rh7 22.f4 Cg4 23.Cd5 Ae6 24.f5 gxf5 25.Cf4 Dh6 26.exf5 Axa2! 27.b4 Df6! 28.Dxa2 Tfc8+ 29.Ac4 Dc3+ 30.Dc2 Dxc2+ 31.Rxc2 Txc4+ 0-1
XII Torneig Obert Festa Major de Sant Andreu de Palomar 1983
Destacada victoria del MN Jaume Anguera Maestro
Y por no ser menos, Jaume Anguera Maestro, no sólo venció en el XII torneo abierto de Sant Andreu, sino que también lo hizo en el Abierto de Barcelona. Antes de pasar a hablar sobre ello, veamos el cartel anunciador…
Como vemos en la clasificación que sigue, Jaume Anguera venció de forma indiscutible. El torneo tuvo 84 jugadores inscritos, de los cuales 63 terminaron jugando todas las partidas. Si la participación fue la más numerosa hasta la fecha, la calidad fue aún más importante. Sólo basta mirar la lista de los 26 jugadores que figuran a continuación. Floja la actuación de Josep Antoni Miralles, vencedor en 1978 y muy meritoria la de Joaquim Travesset Ribera, que con sus cinco puntos conseguía el ascenso a categoría Preferente, al igual que Josep Maria Rise, Moncusí y J.M. Pérez Fernández. Muy buenas las clasificaciones de Maiztegui y Juli Picatoste.
También el Grupo B, con jugadores de 2ª y 3ª categorías tuvo un buen éxito, con la clasificación final de 80 jugadores. Ascendieron a primera categoría los seis primeros y M. Cáceres, mientras que el séptimo clasificado, Abril, que era tercera, ascendió a segunda categoría, al igual que los clasificados del 9 al 26, con excepción de Bollero y Fabián que ya la poseían. Estos fueron los primeros veintiséis.
1983 - Michael Rahal - VIII Abierto Infantil
(Recibiendo el trofeo de campeón de manos de Àngel Ribera)
(Foto: Archivo)
También el Grupo C, destinado a Infantiles, tuvo una buena concurrencia, finalizando el torneo treinta jugadores. Correspondió la victoria al hoy maestro internacional Michael Rahal. Victoria que le supuso el ascenso a segunda categoría, al igual que Castillo. Si bien Llorenç Arbonés fue el primer clasificado del club, he de decir que el juego más compacto y serio lo desarrolló Albert Travesset. La pérdida de la última partida –estaba muy nervioso- le costó muy caro, ya que con una victoria incluso podía haber alcanzado podio. Los demás infantiles del club, Josep Arbonés, Miquel, Busquets, M. Calvo y J. Calvo, lo hicieron bastante bien, notando una buena progresión. La nota positiva y anecdótica fue la inscripción de Richard Rahal –SEIS AÑOS-, hermano del vencedor, que jugó con mucha seguridad y alcanzando el 50% de la puntuación. Un jovencito que se ganó la admiración de todos.
Este año fue la primera vez que se adjudicaba un premio a los tres equipos -de cuatro jugadores- mejor clasificados. Nuestro equipo A venció de forma justa.
¿Qué le debe decir Josep Boguñà a Àngel Ribera?
Joaquim Bescós Mambrona fue otro de nuestros más estimados jugadores. Poseía un juego de ataque como pocos. Siempre estaba dispuesto a entregas en su afán de encontrar armonía en su juego combinativo que fuera un peligro para jugadores consagrados. Antonio Medina, el campeón de España, fue testigo y víctima a la vez, en una partida que sostuvieron en un torneo de invierno en el Ruy López-Tívoli. Entonces Bescós no había cumplido aún los 19 años. Aprendió a jugar al ajedrez a los once años y su “profesor” fue su hermano Pepe, que al poco tiempo ya le vencía. En su trayectoria ajedrecística pasó por diversos clubs, empezando por la Associació de la Concepció, Creu Roja, Ruy López-Tívoli, Sants y Seat, acabando en el C.C. Sant Andreu. Estos cambios de club eran la prueba que nunca tenía un no para nadie y casi siempre se dejaba convencer por sus amigos.
Joaquim Bescós era un caso anecdótico dentro de la familia ajedrecista ya que, sin poseer un gran conocimiento de las aperturas, su juego se basaba en la intuición, su arma preferida en las partidas de combinación. Recuerdo que en cierta ocasión le pregunté por qué no le gustaban los finales de partida -un tema que a mí siempre me interesó-. Su respuesta fue contundente: -¿Por qué quieres que me distraiga con finales si yo nunca llego a ellos?-. O sea, ganaba o caía con estrépito. Su lema era este: JUEGO BRILLANTE. Bescós fue una gran persona, lo mismo que su hermano José. En la imagen que sigue le vemos, precisamente, recogiendo uno de estos premios de belleza que él siempre andaba buscando. El del torneo abierto de 1983. A lo largo de su vida conquistó más de una treintena de trofeos, así como tres premios de belleza.
Lamentablemente, sus problemas de insuficiencia renal -que padecía desde hacía unos cuantos años- no le permitieron disfrutar aún más de este gran sentido que tenía por la partida. Los que le conocimos nunca olvidaremos su espíritu optimista, su gran compañía y su innata predisposición amigable hacia todos los ajedrecistas y amigos.
Ahora podéis ver la partida que venció a Medina, después de una apertura a “su” estilo.
Bescós Mambrona, Joaquín - Medina García, Antonio [C29]
Social C. A. Ruy López-Tívoli – 5/3/1950
1.e4 e5 2.Cc3 Cf6 3.f4 d5 4.fxe5 Cxe4 5.Cf3 Ae7 6.d4 0-0 7.Ad3 f5 8.exf6 Axf6 9.0-0 Cc6 10.Cxe4 dxe4 11.Axe4 Cxd4 12.Cg5 Af5 13.c3 Axe4 14.Cxe4 Ce6 15.Cxf6+ Txf6 16.Dxd8+ Txd8 17.Txf6 gxf6 18.Ae3 b6 19.Te1 Rf7 20.Te2 Td1+ 21.Rf2 Td5 22.Td2 Txd2+ 23.Axd2 Cc5 24.Re2 b5 25.b3 a6 26.Re3 Re6 27.Rd4 Cd7 28.Af4 c5+ 29.Re4 Cb6 30.g4 c4 31.Rd4 cxb3 32.axb3 Cd7 33.h3 a5 34.c4 a4 35.cxb5 a3 36.Rc3 Cb6 37.Ac1 Cd5+ 38.Rc2 a2 39.Ab2 Ce3+ 40.Rd3 Cd1 41.Rc2 Ce3+ 42.Rc1 Cd5 43.Ad4 f5 44.gxf5+ 1-0
Y esta otra, que obtuvo el premio de belleza, para que veáis su estilo.
Salinas (Espanyol) - Bescós Mambrona, Joaquín (Seat) [C31]
VI Trofeo Dicen - Mayo de 1972
1.e4 e5 2.f4 d5 3.exd5 c6!? [3...exf4 ] 4.Cf3 e4 5.Ce5 Cf6 6.dxc6 Cxc6 7.Ab5 Ac5 8.d4 exd3 9.Dxd3 [9.Cxc6 bxc6 10.Axc6+ Ad7 11.Axd7+ (11.Axa8? Dxa8 12.Dd2 0-0-+ ) 11...Dxd7 12.Dxd3 Dxd3 13.cxd3 0-0-0= ] 9...De7 [9...0-0 parecía mejor. Pero Bescós sigue con su idea.] 10.De2 0-0 11.Cxc6 Dxe2+ 12.Rxe2 Ag4+ 13.Rf1 bxc6 14.Axc6 Tad8 15.Cd2 Ae3 [>=15...Td6 16.Ab5 Ce4-+ ] 16.Cf3? [>=16.h3 Ah5 17.g4= ] 16...Td1+ 17.Re2 Txh1 18.Rxe3 Td8 19.Cd2 Ad1 20.c4? [>=20.h3 ] 20...Cg4+ 21.Re4 Te1+ 22.Rf5 h6 (ver diagrama)
23.Cf3 [23.Af3 Cf2 24.Axd1 g6+ 25.Rf6 Te6# ] 23...Cf2! 24.Cxe1 Ag4+ 0-1Esta partida mereció el premio de belleza del torneo.
Y esta última, que ignoro si alcanzó el premio de belleza, aunque sí el Campeonato de España de enfermos renales, llevaba también el sello de su autor. En este torneo formaron 17 jugadores de las provincias de Murcia, Guipúzcoa, Vizcaya, Baleares, Valencia y Madrid.
Muñoz (Murcia) - Bescós Mambrona, Joaquín (Sant Andreu) [C28]
Campeonato de España de enfermos renales - 3ª Ronda
Murcia 20/07/1983
1.e4 e5 2.Ac4 Cf6 3.Cc3 Cc6 4.Cge2 Cxe4!? Bes Bescós a su estilo 5.Axf7+ Rxf7 6.Cxe4 d5 7.C4g3 Ac5 [7...h5 era otra alternativa] 8.0-0 h5 9.Cc3? [>=9.d4 ] 9...Ag4 [9...h4!? ] 10.Cge2 Cd4 11.h3 (ver diagrama)
11...Cf3+ [11...Dh4!! esta era más fuerte, aunque la escogida por Bescós es más vistosa y conseguía también su propósito.] 12.gxf3 Axf3 13.Rh2 e4 14.De1 Ad6+ 15.Cg3 h4 16.d3 hxg3+ 17.fxg3 Txh3+! 18.Rg1 [18.Rxh3?? Dh8+ 19.Ah6 Dxh6# ] 18...Th1+ 19.Rf2 Axg3+ 0-1 Otra de las deslumbrantes partidas de Bescós.
El 18 de julio de 1983 fallecía en Moscú, a los 74 años, Salomon Mikháilovitch Flohr. Jugador de gran talento, que lo paseó por tierras catalanas en algunos torneos de los años ’30. Uno de ellos fue el de Roses 1935, y otro el de Barcelona 1935. Llegó a ser considerado como el segundo mejor jugador del mundo y empató un match a doce partidas con Botvinnik. Los entendidos le llamaban “el pequeño Capablanca”.
El 24 de noviembre de 1983 también se producía en Barcelona una noticia luctuosa que tuvo gran resonancia en todo el ajedrez nacional. Fallecía Joan Torquet i Guasch, un enamorado del ajedrez, un trabajador incansable desde su despacho de la calle de Trafalgar nº 3, que es donde tenía fijada la sede la Federació Catalana d’Escacs y donde ejercía su cargo de Secretario General de dicha Federación. El mes de abril de 1950, cuando hacía bien poco que Vicente Almirall era presidente de la Federación, le llamó.
En aquella época Torquet era el presidente del Club d’Escacs Dàlia -entonces ubicado en la calle Sant Pau, 82-; un club bastante activo y, tal vez por ello, se había fijado en él, Torquet aceptó, pero con la condición que únicamente lo hacía por seis meses. Cuando en 1955 cesó el secretario, señor Arquimbau, Almirall no dudó en ofrecérselo a él. En aquel tiempo Torquet trabajaba de administrativo en la Mutua y únicamente dedicaba a la Federación las horas sobrantes, a cambio de una pequeña gratificación que prácticamente cubría los gastos de desplazamiento.
Pero no fue hasta 1960, con la presidencia de Joaquim Muntaner, que se le ofreció la ocupación total, puesto que la actividad había aumentado considerablemente. Entonces dejó la Mutua y se implicó totalmente con lo que siempre le había gustado, el ajedrez.
Allí es donde le conocí por primera vez en mis visitas, como delegado del club, para entregar las Actas de los partidos que se habían disputado de los campeonatos de Catalunya y así era, en aquella época, su despacho, junto a toda una serie de sellos, timbres, dispuestos para ser estampados en los escritos, licencias federativas…, con su viejo teléfono colgado en la pared y con su inseparable máquina de escribir, que había conocido todos los emparejamientos de todos los torneos de Catalunya, para luego trasladarlos a su vieja ciclostil para hacerlos públicos. Pero su tarea no terminaba en la Federación, sino que continuaba en su club, el Español, donde existían grandes figuras de nuestro ajedrez y donde contaba con un colaborador ejemplar, Enric Bayés Muñoz. Fueron artífices de muchas victorias. La desaparición de ambos acabó prácticamente con la existencia del club. Torquet fue la persona donde descansaban todos los problemas de las juntas directivas. A pesar de su apariencia seria, era admirado por todos. Su dedicación no tenía límite ni conocía topes horarios. Siempre fue respetado por todos, por su sencillez y comprensión. Así le conocí y así lo he querido recordar.
Allí me había topado con los delegados de casi todos los equipos, que cumplían con la misma misión. En cierta ocasión también tuve la oportunidad de conocer en persona al gran Ricardo Calvo, que estaba conversando con Torquet y al que le felicité por su victoria contra Korchnoi. Mis visitas a la Federación las aprovechaba para, al finalizar mi cometido, pasar por la Granja Urquinaona, donde tenía su sede el Ruy López-Tívoli. En su altillo siempre había mucha actividad y no era extraño encontrar a Jaume Lladó y Vicenç Almirall jugando partidas de café, de forma continuada, mientras Almirall encendía un pitillo tras otro.
En una de estas visitas a la Federación fui testigo de unas de las anécdotas que nunca he olvidado. Debemos redordar que Torquet lo hacía todo. Y cuando digo todo, es todo; desde los emparejamientos de todos los torneos, desde las fichas manuales -entonces no había ordenadores ni nada parecido-, hasta su mecanografiado en clichés especiales para luego ser tratados en la ciclostil, con objeto de poder hacer tantas copias como clubs existían. Era un trabajo de horas, muchas horas. Pues bien, un día se presentó un jugador y le dijo:
“-Señor Torquet, he visto el listado de la próxima ronda y veo que me ha emparejado con un jugador que ya había sido mi adversario en una ronda anterior.”
Y Torquet, en una de sus soluciones salomónicas, le preguntó:
“-¿Y que hicistes?”
“-Perdí, le contestó.”
“-Pues para esto os he enfrentado otra vez, para que le ganes.”
¿Cómo podía Torquet rectificar todos los emparejamientos y comenzar de nuevo desde el principio, con todos los poblemas de tiempo y trabajo. Está claro que hoy esta decisión sería del todo injusta, pero hay que situarse en aquella época, donde se disponía de muy pocas cosas para hacer frente a toda la organización. Este era Joan Torquet.
Es ahora, cuando intentaba recordar a este hombre que tanto hizo por el ajedrez, cuando me he dado cuenta de un sentido artículo realizado por mi antiguo amigo de club, Lluís Prados Font, -no sé si entonces había ingresado en la Penya Cultural Barcelonesa, o bien en el Ateneo Colón- que glosaba y recordaba su figura. Decía esto:
“Era un domingo de noviembre. Un día gris, triste; uno de estos días clásicos de otoño azotado por las primeras ráfagas frías anunciadoras de la proximidad invernal. En las dependencias sociales del Club Ajedrez Barcelona estaba desarrollándose la confrontación más trascendental del Campeonato de Cataluña por equipos. En aquella sala de juego se habían dado cita la mayor parte de los más destacados ajedrecistas no ya sólo de Cataluña sino de España. A excepción del maestro internacional Antonio Medina que se encontraba en Londres arbitrando el importante match Ribli-Smyslov, podía apreciarse la presencia de Pomar, Campos, Sanz... por el conjunto local; Bellón, Orestes Rodríguez, Martín... por el C.A. Vulcá. Ambos ostentaban los dos iniciales puestos en la clasificación general, lo que suponía un aliciente más a los muchos que ya había, a priori, despertando el match. Descansando en una de las butacas del vestíbulo me topé, al llegar, con Joan Torquet, el hombre que, durante tantos años había asumido las secretarías del desaparecido Club Ajedrez Español y de la Federación Catalana de Ajedrez.”
Joan Torquet, con su inseparable amigo Enric Bayés Muñoz
-Dos figuras del Club Ajedrez Español-
(Foto: Archivo)
“Le saludé cordialmente, con la misma efusión que a un viejo amigo. Pero aquel no era ya el mismo Torquet de otras ocasiones. Estrechó mi mano pero su presión apenas me pareció perceptible. Descubrí al acto que su aspecto en modo alguno se correspondía con el del hombre enérgico y siempre activo que, desde hacía muchos años, había conocido en aquel despacho de la calle Trafalgar. En su apariencia se adivinaba la pérdida de muchos kilos; su voz era queda, tartamudeante, apenas perceptible... él que siempre había sida dueño de un potente vozarrón. Su rostro macilento, demacrado, estaba provisto de una expresi6n extraña, única, que, como un viento helado, estremeció toda mi espina dorsal. Aquella fisonomía no se mostraba angustiosa, ni siquiera triste... tan sólo quizá con el velo de una sombra indefinible pero indudable anunciadora de la inminente visita de la muerte.”
“-¿Cómo se encuentra?- le pregunté en catalán en tanto estrechaba su diestra.”
“- Fastidiado, chico. Fastidiado- me respondió en un hilo de voz y en el mismo idioma.”
“Quise interesarme por su estado; por la dolencia que le aquejaba, por las opiniones de los doctores que le atendían, por los medicamentos que sin duda le habrían recetado... mas ante la inminente llegada de la muerte que adivinaba sin la menor duda, todo se me antojó fuera de lugar y quizá con la contraproducencia de ahondar en una herida que ya era imposible cerrar. Disertamos unos momentos sobre ajedrez, sobre la calidad de los maestros que, en aquel domingo sombrío, se habían reunido en aquel local para ofrecer a la afición una demostración de sus habilidades en esta especialidad deportiva... pero mi mente y todo mi ser se hallaban muy lejanos de semejante conversación, inmersos como estaban por la amargura que experimentaban.”
“Muy escasos días después "La Vanguardia", el periódico en el que en tantas y tantas ocasiones había colaborado, publicaba dos sucintas notas necrológicas, una en castellano y en catalán la otra, en las que hacían partícipes a la gran familia ajedrecística del óbito de Joan Torquet Guasch. "Els escacs catalans estan de dol" finalizaba muy certeramente la esquela en catalán”.
“Los que tan sólo le habían conocido superficialmente estaban convencidos de que su carácter era autoritario, implacable, duro... Pero los que tuvimos ocasión de tratarle más íntimamente,.. no ignorantes de su admirable capacidad de trabajo y sobre todo de trabajo bien hecho en favor del ajedrez, de su ingente obra organizadora en pro del ajedrez, de las muchas, muchísimas horas que era capaz de permanecer sobre la máquina de escribir, de la férrea disciplina que a sí mismo se imponía en beneficio del mejor desenvolvimiento de los certámenes que cuidaba con esmero, con cariño diría yo... los que sabíamos de toda su constante actividad, de sus múltiples viajes para defender nuestro ajedrez, de las horas y horas que este deporte llegó a apartarle de su familia... estábamos convencidos que tras aquella apariencia dictatorial se escondía el deseo irrefrenable de que los directivos y los delegados de los clubs adscritos a los certámenes que él organizaba sin escatimar sacrificios ni tiempo, fueran como él de disciplinados, como él de adictos al ajedrez, aquel ajedrez de sus amores, que, en definitiva , cuidaran desde sus puestos en sus clubs al ajedrez con el mismo esmero e idéntica puntualidad que él lo hacía desde detrás de aquella mesa de la secretaría de la Federación Catalana de Ajedrez.”
“Lejos quedan aquellos días en que, mientras las actas iban llegando, disertaba con los delegados de los clubs salpicando, de curiosas anécdotas vividas en sus múltiples torneos presenciados, la conversación. Lejos queda su labor en la Federación Española de Ajedrez, defendiendo desde su puesto en aquella Junta, los intereses de nuestro ajedrez. Lejos también queda la noche aquella en que, en un importante hotel barcelonés, la afición catalana le tributó un merecido homenaje.”
“Lluís Prados Font”
Pero fue unos años antes, el viernes, 9 de febrero de 1979, a las 21’15 horas, cuando se le tributó un merecido homenaje en el Hotel Diplomátic, de Barcelona. Se le entregó una bandeja de plata dedicada por todos los clubs, diferentes obsequios de entes oficiales y prensa… y ante la presencia multitudinaria de particulares, representantes de clubs y de diferentes organismos, se le hizo entrega de la Medalla al Mérito Deportivo de Ajedrez.
Este homenaje que el ajedrez catalán y español dedicó a Joan Torquet Guasch, fue una cosa impresionante. Nunca se había visto cosa igual. La idea nació de Fernando Molina Solís, presidente de la sección de ajedrez del Grupo de Empresa SEAT, que la presentó el 10 de octubre de 1976 en la Asamblea de Clubs. Una propuesta que mereció su aceptación por aclamación. Así se reconocían sus veinticinco años de federativo.
Todos los personajes de los clubs y organismos se volcaron en ello, como podemos ver en las imágenes que siguen. En la mesa presidencial figuraban, además del homenajeado, personajes relevantes del mundo del ajedrez, como Ángel García Fernández, presidente de la FEDA, Román Torán, Agustín Pujol, presidente de honor de la FEDA, Joan Segura, Ramon Casanovas, Jordi Vila Brichs, Pere Casajuana, Jordi Puig, Antonio F. Argüelles…
…mientras que en las demás mesas observo a Lluís Viladot Serra, Joan Pascual Rigau, Jaume Mora Corbera, Joaquín Gil Daniel, Jaume Boix Sánchez, Àngel Ribera Arnal, Josep Paredes Prats, Enric Bayés, Jordi Bechini, Fernando Molina, Artur Pomar, Francisco García Orús, Dr. Josep Marcos, Ramón Crusí Moré, Lucien Francino, Enric Catalán, Eduardo Pérez Gosalbes…
Posteriormente, Jordi Vila Brichs, también miembro de la citada Comisión, leyó diversos telegramas de adhesión que se recibieron por parte de entidades y federaciones. Entre ellos había uno del Presidente de la FIDE, Fridrik Olafsson, que lamentaba no poder estar presente. Hubo unos cuantos parlamentos, entre los cuales destacaron los de los señores Pujol y García Fernàndez; este último impuso a Joan Torquet la Medalla de la FEDA que le había sido concedida. Francisco Albiach, en nombre del diario “DICEN ...”, obsequió al homenajeado con un moderno y valioso reloj de pulsera. Un miembro del Club d'Escacs Espanyol, al cual tantos años estuvo afecto Joan Torquet, le impuso la insignia de oro y brillantes del club. Jordi Puig Laborda, como miembro de la Comisión Organizadora, le libró una artística bandeja de plata en la cual se habían grabado las inscripciones de los clubs que habían querido sumarse al acto y que contenía una dedicatoria como recuerdo. Finalmente, el Sr. Torquet, emocionado, agradeció a los presentes su asistencia; agradecimiento que hizo extensivo a todos los ex directivos, directivos actuales, jugadores, clubs y organizadores, la colaboración que siempre le habían ofrecido, añadiendo que mientras él pudiera seguiría trabajando en pro del ajedrez catalán.
Ahora una foto histórica. Torquet -cartera en mano para no perder detalle-, seguido de Jordi Puig, Antonio F. Argüelles, Joan Segura y el presidente de la Generalitat de Catalunya, Josep Tarradellas i Joan.
Año 1984
La temporada 1983/84 comenzó muy bien para el C.C. Sant Andreu, que jugaba en el grupo 1 de la 2ª División, quedando empatado a diez puntos con el Club d’Escacs Centelles, que nos aventajó por el Sonneborn-Berger. Fue el único partido que perdimos. Este segundo lugar dio paso a jugar el play-off de ascenso a la máxima categoría contra la Gran Penya de Vilanova i la Geltrú, que también quedaron segundos en el grupo 2 de la 2ª División.
Pero primero vamos a ver cuáles fueron los resultados entre todos los equipos:
Y llegó el play-off. El partido a media mañana parecía no revestir ninguna dificultad. Con las victorias de Àngel Ribera sobre Flores y Travesset ante Josep Llaverías, el marcador se ponía en 4½ a 1½. A partir de este momento el resto de las partidas se complicaron y la Gran Penya reaccionó, anotándose el 4½ a 3½, con dos puntos seguidos. Quedaban las partidas de Anguera y Miralles, en posiciones muy críticas para nuestros jugadores. Miralles, que había obtenido permiso militar para poder jugar esta eliminatoria y tuvo que trasladarse desde Canarias, hizo un análisis magistral en el aplazamiento -entonces las partidas se suspendían a las 4 o 5 horas de juego- y consiguió entablar su partida; ahora el marcador registraba un 5 a 4 interesante. Pero con un supuesto empate a cinco no hubiera sido suficiente para el ascenso, ya que la Gran Penya tenía un “mejor holandés”. Esto implicaba que Jaume Anguera había de puntuar. Y lo hizo. En posición francamente inferior, pero haciendo gala de gran serenidad -como ha sido siempre su situación delante del tablero- alcanzó tablas. Unas tablas que valían un ascenso, veinte años después del primero. Un ascenso que bien hubiera podido decantarse en favor de la Gran Penya. Y todo esto después de haber comenzado nuevamente la historia de nuestro club desde la mismísima cola llegando, de forma paulatina y continuada, hasta la “máxima”, premio a nuestra perseverancia en la juventud
Entretanto, nuestros demás equipos empezaban a dar sus frutos. En esta temporada habíamos inscrito cuatro equipos más para los campeonatos de Catalunya por equipos. Uno en tercera categoría y los otros tres en promoción. Tanto el B como el C ascendieron de categoría al quedar campeones de grupo.
El B conseguía el campeonato en el grupo 5 de la 3ª Categoría provincial. La victoria se fraguó en la ronda 9ª con la victoria en el local de La Colmena y en la penúltima ronda al empatar -esto era suficiente- en nuestro local contra el Moià, puesto que nosotros descansábamos en la 11ª ronda. Podemos ver los resultados contra La Colmena y la clasificación por equipos…
También muy buena fue la actuación de nuestro tercer equipo, quedando campeones de grupo sin perder partida. La clave estuvo en la última ronda, al vencer al fuerte equipo del Vilassanès en nuestro local. Esto supuso el ascenso a tercera categoría.
El cuarto de los equipos quedó situado en quinto lugar. Una clasificación meritoria.
Y el quinto de los equipos, donde jugaban únicamente infantiles, quedó en último lugar, con solamente un empate ante el Comtal. De todas formas creo que la “prueba” resultó satisfactoria, puesto que los jovencitos tuvieron ocasión de empezar a competir de forma real en su primer contacto en las competiciones.
Cinco equipos concursando en los campeonatos de Catalunya por equipos no es nada fácil y menos en un club modesto como el nuestro. Esto significaba movilizar un mínimo de 32 jugadores cada domingo, además de contar con un buen número de suplentes para cubrir las posibles bajas. Lejos quedaban aquellos años en los que únicamente se contaba con los jugadores imprescindibles para confeccionar un solo equipo.
Debo destacar que se jugó un match infantil contra nuestros vecinos de La Lira. Perdimos en la ida por 5½ a 2½, ganando en el partido de vuelta por 6½ a 3½. Por tanto, empate a 9… y todos contentos ante el alto grado de compañerismo entre ambos equipos.
A nivel individual, destacar las victorias de Jaume Anguera, tanto en nuestro torneo abierto como en el de Barcelona, como veremos después. Además, nuestros jugadores José Antonio García, Josep Maria Rise y Joaquim Travesset Ribera ascendieron a categoría Preferente. A segunda categoría subieron Joan Sala, Jordi Algué, Francesc Piedecausa y Jordi García.
Por otro lado, apareció esta noticia en uno de los boletines de la FCdE, dando cuenta -ahora sí- de la constitución oficial de la Delegación de Veteranos de la Federación Catalana, que hasta este momento había actuado siempre al margen de la misma, por no recibir el soporte deseado.
También en este año 1984, un compañero del trabajo, que sabía de mis aficiones al ajedrez, me hizo entrega de estos versos.
EL AJEDREZ
Para personas que piensan
es el juego de Ajedrez
para personas que saben
lo que es ganar o perder.
Piensan porque están jugando
con unos grandes poderes
que se defienden matando
y luchan hasta la muerte.
Esa seria fantasía
del luchado implacable
que enfrentan a los dos reinos
y se hacen los responsables.
Esa lucha sin cuartel
que se están imaginando
y dentro de aquel tablero
sin piedad se están matando.
Buscan una estratagema
para tener ocasión
de matar a un caballero,
a su dama, o a un peón.
Estos hombres muchas horas
trabajan con su memoria
porque quieren conseguir
la codiciada victoria.
Y termina la partida
como una guerra cualquiera.
El vencedor, orgulloso,
el mejor se considera.
El vencido se conforma
porque perdió la partida.
En ella dejó su honor
Y pudo salvar su vida.
Así piensan estos hombres
que juegan al Ajedrez.
Hacen de un juego cualquiera
una guerra sin cuartel.
Pero pueden demostrar
que son hombres de talento,
sus guerras nacen y mueren
dentro de sus pensamientos.
Antonio Lozano 1984
El 8 de abril de 1984 se jugó un match a tres tableros en la Plaza Orfila, delante del Ayuntamiento (Consell Municipal de Sant Andreu), entre tres parejas de jugadores del Club d’Escacs La Lira, contra otras tres del Casal Catòlic de Sant Andreu. Las piezas fueron diseñadas y creadas por el escultor Joan Mora Soler.
Inicialmente estaba prevista la actuación de Eduardo Pérez en el conjunto de La Lira, tal como refleja el cartel, pero fue baja de última hora y en su lugar entró Josep Mariné.
Lo más importante no era vencer, sino crear un poco de bullicio entre la gente, como una forma de promocionar el ajedrez. Y creo que se consiguió. Lástima que esta fiesta no tuviera continuidad.
El match estuvo patrocinado por el Ayuntamiento de Sant Andreu y ambos clubs colaboraron en la celebración. El Periódico hizo una buena reseña del match. La idea era la de fomentar la práctica de este tipo de ajedrez en las plazas, al igual que ya se venía haciendo en algunos países extranjeros. El Periódico, en un artículo de Pepa Roma, dedicó prácticamente toda la página 19 de su edición del lunes, 9 de abril, para comentar que esta inauguración estaba destinada a fomentar el ajedrez entre todos los ciudadanos que podían disponer libremente de dicho espacio para realizar las partidas que considerasen oportunas. Este recorte que sigue pertenece a dicha página del periódico barcelonés.
Al poco tiempo, el Ayuntamiento, que era el depositario de las piezas, ya no sabía dónde se habían guardado y poco a poco decreció el interés de los dos clubs ante la pasividad de dicho organismo.
En la siguiente imagen a los cuatro personajes que contribuyeron a la organización…
Los organizadores
De izquierda a derecha:
Representante de Deportes del Ayuntamiento
Joaquim Travesset Barba, presidente del C.E. C.C. Sant Andreu
Josep Masgoret Casanoves, presidente del C.E. La Lira
y Germà Vidal, Regidor del Ayuntamiento de Sant Andreu
(Foto: Archivo)
Estos fueron los resultados:
Veteranos: Àngel Martorell y Pere Fernández (La Lira) contra Àngel Ribera y Josep Boguñà (Sant Andreu) 0-1
Infantiles: Daniel Travesset y Félix Romero (Sant Andreu) contra Juan Carlos Tebar y Daniel Jarne (La Lira) 1-0
Seniors: Josep Mariné y Francisco García-Orús (La Lira) contra Joaquim Travesset Ribera y José Antonio Miralles (Sant Andreu) 1-0
8 de abril de 1984 - Ajedrez gigante en la Plaça Orfila
(Match: Sant Andreu 2 - La Lira 1)
(Foto: Archivo)
Ni las obras que se realizaban en la plaza Orfila fueron impedimento para que los aficionados se acercaran al partido. Algunos, con sus minúsculos tableros de bolsillo, seguían una partida con gran interés.
8 de abril de 1984 - Ajedrez gigante en la Plaça Orfila
Jarne y Tebar, la pareja de La Lira, junto a otro aficionado
(Foto. Archivo)
8 de abril de 1984 - Ajedrez gigante en la Plaça Orfila
Un aspecto de una de las tres partidas
(Foto: Archivo)
8 de abril de 1984 - Ajedrez gigante en la Plaça Orfila
Jarne y Tebar, la pareja de La Lira
(Fuente: El Periódico)
Pasaban los años y Àngel Ribera seguía practicando sus sesiones de simultáneas que habían dado la vuelta por toda la geografía. En esta ocasión las realiza en el Casal d’Avis de Sant Andreu, situado en el nº 22 de la calle Gran de Sant Andreu. Detrás suyo, su hermano Manuel Ribera.
Ricard Guinart Cavallé, otro de los personajes que sin su concurso y dedicación el ajedrez no sería lo que es hoy. Falleció el 2 de julio de 1984, después de haber insertado cientos y cientos de artículos en Mundo Deportivo, comunicando todo aquello que estaba relacionado con el ajedrez y manteniendo conversaciones con los más prestigiosos maestros para que concursaran en nuestras tierras. Los que no conocían de su existencia les invito a que entren en la hemeroteca de El Mundo Deportivo y se darán cuenta del enorme trabajo de este hombre. Pero su tarea ya venía de antes, de aquellos tiempos de la lejana revista D’ací d’allà, de los años treinta, donde utilizaba en sus artículos el pseudónimo de “El Cavaller de Barbarà”. Y es que no solamente los maestros hacen grande a nuestro juego. También lo engrandecen todos aquellos que han dejado por doquier su huella en letras de molde. Este sencillo recorte que sigue es la única referencia que he encontrado de su fallecimiento…
… y este otro, que veremos más adelante, a un homenaje que se le tributó, tres meses más tarde, en el que se le distinguió, a título póstumo, con la Medalla al Mérito Deportivo de la Federación Catalana, según reza el recorte aparecido en Mundo Deportivo. Poca cosa para una persona que, en sus sesenta años de promoción continuada del ajedrez, ni tan siquiera he podido encontrar en los boletines de la Federación, tanto de 1984 como de 1985, un espacio destacado donde constara el agradecimiento de toda la afición y donde los regidores federativos se hicieran eco de las virtudes de nuestro personaje. Tuvo que ser la FEDA quién, a instancias de la Federación Catalana y aprovechando que se concedía la Medalla de Oro al Mérito Ajedrecista a don Joaquim Buxó de Abaigar, Marqués de Castellflorite, aprovecharan la ocasión para proponer la de Guinart. Y así fue como la Federación Española de Ajedrez lo tuvo en cuenta, concediéndole la Medalla de Plata al Mérito Ajedrecista -ver Mundo Deportivo de fecha 18 de abril de 1964-, como premio a la labor que desde hacía 30 años venía realizando desde las columnas de dicho diario en favor del ajedrez. Un galardón que no recibió de la Catalana hasta después de su fallecimiento en 1984. Con los años sus artículos y comentarios crearon escuela. Un fragmento de la nota aparecida en Mundo Deportivo decía así:
Me gustaría estar equivocado, pero otros que hicieron menos, o casi nada, recibieron mejores lauros.
Otro de nuestros buenos jugadores es Joaquim Travesset Ribera. En 1984 alcanzó el campeonato de Catalunya de partidas rápidas. En 1989 quedó campeón absoluto de Catalunya de partidas rápidas -sistema Masnou-, durante la XII Festa Catalana dels Escacs. Y en 1990 obtuvo el título de Maestro Catalán. Fue el primero que lo conseguía en el C.C. Sant Andreu, puesto que cuando lo alcanzó Josep Miralles, hemos de considerar que ya no pertenecía al club.
Además, la temporada de 1984 consiguió buenos resultados a pesar de tener que compaginar el ajedrez con el servicio militar. Alcanzó la Preferente en el Obert de Sant Andreu; 4º/5º en la Preferente ordinaria en el Campeonato individual de Catalunya. Mejor primera en los torneos de partidas rápidas de Cerdanyola del Vallès y de Rubí. Campeón social de 1984, tanto en normal como en rápidas.
Un año más el social fue jugado utilizando el sistema suizo. Aunque la clasificación que sigue lo dice todo, es de resaltar, en primer lugar, mi floja puntuación en las dos últimas rondas, la cual cosa me privó de renovar el título cuando todo parecía favorable. Perder contra Joaquín Bescós entraba dentro de la lógica, pero entablar un final contra Rifé, que podéis ver en el pgn, en un final de torres con peón de más y mejor situación del rey, no tiene explicación. De esta forma se alzó con el titulo mi hijo Joaquim. Buena la clasificación de Ricard López y discreta la de Àngel Ribera. Los demás dentro de un orden natural, con excepción de Daniel Travesset, Pere Díaz y Jordi García, con esperanzadoras actuaciones, superando a los preferentes Rise, Josep A. García, Duch, Simón y Camacho.
El campeonato social de partidas rápidas a 5 minutos tuvo, de nuevo, a un invitado especial, Josep Paredes Prats, pero en esta ocasión no consiguió vencer, por sus derrotas ante Travesset II y Rifé, así como las tablas con Sergi Picatoste.
Joaquim Travesset Ribera perdió únicamente una partida, con su padre, cediendo unas tablas contra su amigo de peleas, Joan Camacho. Su torneo fue para enmarcar, venciendo al “especialista” Josep Paredes. Muy buena la clasificación de José Antonio García y estimable y sorprendente la de Sergio Picatoste. De los dos infantiles, Fèlix y Daniel, el mejor fue el primero, que consiguió vencer a dos preferentes y entablar contra otro, mientras que el segundo vencía a Ricard López. Esto ya eran vaticinios de lo que podría ocurrir en un futuro cercano. En contrapartida, flojas, muy flojas, las acutaciones de Tacón y Sosa y meritorios los 2½ puntos de Algué.
Con respecto al social infantil, Xavier Bescós no pudo revalidar el título del año anterior. Albert Travesset se impuso con autoridad, cediendo únicamente unas tablas. Podemos clasificar como buenas las actuaciones de Llorenç Arbonés, Busquets y Miquel.
XIII Torneig Obert Festa Major de Sant Andreu de Palomar 1984
Ajustada victoria de Josep Antoni Miralles sobre Jaume Anguera
Con esta victoria en el Torneig Obert de Sant Andreu 1984, Josep Antoni Miralles repite el triunfo obtenido en el año 1978.
En el grupo de Maestros, Preferentes y Primeras, éstos fueron los primeros 13 jugadores clasificados de un total de 68. Se habían inscrito 88 y poco a poco causaron baja veinte. Por la clasificación podemos darnos cuenta de que la lucha fue muy reñida…
Y esta fue la clasificación por equipos donde los tres primeros obtuvieron premio.
(*) La igualdad de puntos del segundo y tercer clasificados se deshizo por el mejor resultado del primer tablero.
Mientras, en el grupo de segunda categoría…
… hasta un total de 42 jugadores clasificados. Loa 4 primeros consiguieron ascender a primera categoría.
En el grupo C, de jugadores de tercera categoría, estos fueron los seis jugadores mejor clasificados quiénes, además, ascendieron a segunda categoría. Este grupo lo formaban 42 jugadores.
En el Grupo D, correspondiente a los Infantiles, concursaron un total de 46 jugadores. Los diez primeros fueron los que siguen. Notad quiénes quedaron en segundo y cuarto lugar.
Fue tanto el éxito de nuestro Torneo Abierto que las inscripciones aumentaban considerablemente de un año a otro, obligando a la organización a buscar y activar soluciones. Tres de ellas fueron habilitar la Sala Polivalente, la del Grup Taca y el Café del Casal, como si de una sala más se tratara, así como recuperar los viejos relojes rusos que, por cierto, nunca gozaron de nuestra satisfacción, por cuanto la caída de bandera no se veía con la claridad necesaria.
La entrega de los premios del torneo abierto se realizaron el sábado 3 de diciembre. Fue un acto espléndido donde asistieron cerca de un centenar de personas. Después hubo “vermut” para todos los presentes y las clásicas partidas simultáneas -veinte- contra los participants del abierto infantil. Unas simultáneas que fueron realizadas por Josep Antoni Miralles, como estaba establecido. De hecho fueron 19 las simultáneas a infantiles, porque la número veinte fue jugada por los adoslescentes Travesset II y Sala que, de forma conjunta, no pudieron más que conseguir tablas… y con suerte.
Otra de las costumbres que se tradujeron en tradicionales fue jugar por Navidad un campeonato de partidas rápidas, donde los premios eran básicamente productos de estas fechas: Cava, turrones, quesos, vinos, etc., donde cada participante -todos tenían premio- podían escoger por orden de clasificación. El premio gordo era un jamón, que se sorteaba entre todos los participantes. La imagen que sigue es una prueba de ello.
Félix Romero, Miquel Travesset, Daniel Travesset, Joan Camacho,
Sergi Obón, Pere Díaz, Jesús-Pablo Romero y Rodrigo Ramal
Agachados: Joaquim Travesset, Joaquim Sosa, Manuel Simón,
las hijas de Pere Díaz y Joan Casal
(Foto: Archivo)
Continuará...
Joaquim Travesset
5 de septiembre de 2019
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